El jugador argentino reconoce en su despedida del club canario que hay buena sintonía con Luis Miguel Ramis que le ha dado minutos y confianza en el tramo final de la temporada.
Valentín Vada se ha despedido del CD Tenerife, aunque dejando la puerta abierta a un posible regreso tras unos últimos meses que han sido positivos de la mano de un Luis Miguel Ramis que le ha dado la confianza y galones que el argentino ha venido teniendo con cuentagotas desde que llegó al fútbol español hace dos temporadas desde el Girondins de Burdeos.
El jugador rojiblanco indicó en sus redes sociales que «fue un placer” defender los colores del club tinerfeño, aunque su etapa “no empezó como uno hubiera querido en lo personal”. En este sentido, la conexión con Fran Fernández no funcionó como se esperaba y aunque comenzó como titular su protagonismo fue cayendo con el paso de las jornadas hasta llegar bajo mínimos.
El argentino destaca que «luché para poder revertir esa situación y me voy convencido de que así fue. Siempre intentando dar lo mejor de mí”, una mejora en lo individual que vino de la mano de lo colectivo, ya que el equipo isleño logró una permanencia tranquila tras una temporada que no ha sido nada sencilla y en la que se esquivó el pasar apuros en las últimas jornadas.
Ahora toca mirar al futuro y Vada indicó que «sabía que venía un año a préstamo, y después me tocaría volver a Almería», aunque también reconoció que «con el cuerpo técnico tenemos una buena relación, Ramis apostó por mí y eso es de agradecer. Yo no le cierro la puerta al club, pero la decisión la tiene el Almería”.