Radio Marca Almeria
Alejandro Asensio

Pozo y los trampolines

El Almería fue, en otros tiempos, un trampolín ideal para futbolistas que querían relanzar o, directamente, reanimar su carrera. Ahí tenemos los casos de Negredo, Diego Alves, Bruno, Mané, Piatti o Felipe Melo, entre otros, que lograron hacerse un hueco en las mejores ligas y selecciones del planeta. Más reciente el caso de Suso; un súper clase que salvó a la peor plantilla que la UDA ha tenido nunca en Primera y se marchó para, posteriormente, hacerse un hueco en el Milán, que se dice pronto.

No podemos olvidar los casos de Charles y Ulloa; dos delanteros cansados de deambular y vivir experiencias no muy agradables en esto del fútbol que encontraron, aquí, el trampolín perfecto para seguir en lo más alto e incluso, en cuanto a Leo Ulloa, ser campeón de la liga inglesa.

¿Qué es hoy el Almería? Si miramos a Pozo podríamos comprender de dónde venimos y a dónde vamos. Es él nuestra veleta. El viento sopla feo, frío, desagradable. El malagueño, perla del todopoderoso Manchester City, recaló en Almería en los mismos términos que lo pudieron hacer antes cualquier de los mencionados. A mí, personalmente, me recordó, la suya, a las llegadas de Negredo, Piatti, Alves o Suso. Joven y con futuro.

Pero nada fue lo que prometía. La mejor plantilla de la categoría en Segunda División, la de la UDA, comenzó a hacer aguas y Pozo, en su sempiterno papel de jugador con futuro, no disfrutaba de la importancia que su fútbol merecía. Poco a poco, ya en su tercera temporada en el club, Ramis y, ahora, Alcaraz, le han dado galones y puede, sin miedo al banquillo, desarrollar un fútbol de lienzo y pincel que, como no podía ser de otra manera, no pasa desapercibido ante los ojos de aquellos que saben de qué va esto.

Pozo se quiere ir, como se querría ir cualquier jugador con aspiraciones. Es normal. Lo del Barcelona puede ser real o no. Quizá es uno de esos bulos procedentes de cualquier agencia de representación de jugadores para relanzar la imagen de su representado. Quizá, sin embargo, es verdad que en el club blaugrana han visto en el velezano al nuevo Marco Asensio de la categoría. Quizá, quizá, quizá. En cualquier caso, y tirando también de condicionales, si el Almería tuviese un horizonte algo más ambicioso y, sobre todo, unas entrañas serias, Pozo no tendría tanta prisa por hacer un Nauzet y poner pies en polvorosa. Aunque en este caso no para bajarse sino para subirse de nuevo al tren.

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Redacción RADIO MARCA

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