El conjunto entrenado por Carlos Hinojo se adelantó gracias a un gol de Dani Garzón, pero le dieron la vuelta los granadinos en la recta final.
El Polideportivo Almería vio quebrada su buena racha de resultados en su visita a Maracena, un conjunto que históricamente se hace fuerte en su estadio y que esta temporada no quiere ser menos. Los granadinos, que venían de caer en el Anexo siete días antes, salieron con intensidad, aunque el primero en golpear fue el cuadro de Carlos Hinojo que encontró pronto el camino al gol.
Apenas habían pasado cinco minutos cuando Félix tocó para que Dani Garzón hiciese el primero de la tarde ante David que no pudo hacer nada para evitar que los rojiblancos se adelantasen en el marcador como ya había ocurrido en su anterior visita en Torremolinos. Si en tierras malagueñas el Poli supo gestionar hasta el descuento esa ventaja, en esta ocasión apenas le duró cuatro minutos, lo que tardó en llegar un penalti que Neskes no desaprovechó.
El partido se abrió de nuevo con 1-1 y con dos equipos que querían más, aunque con las lógicas precauciones y teniendo en cuenta que el terreno de juego, condicionado por la lluvia, no permitía mayores florituras. Los almerienses dispusieron de varias ocasiones, incluido un lanzamiento a la madera, y encontraron en la contra la manera de hacer daño a los locales, aunque sin apuntillar.
En la segunda parte estiró líneas el Maracena en su objetivo de sumar tres puntos que le alejasen de la zona baja de la clasificación. Pese a las buenas intervenciones de Manu, el gol acabaría llegando con un remate de Muñoz. Quedaban 20 mnutos por delante y aunque lo intentaron los rojiblancos ya no se movería el marcador.