La entidad catalana ha comenzado a trabajar hoy mismo en perfilar la próxima campaña, aunque se quiere ofrecer una buena imagen el próximo domingo.
Tal y como indican en Marca.com, el Espanyol necesitaba ganar en Valencia para seguir vivo en la lucha por la permanencia. Y no lo logró. El empate ha condenado matemáticamente al conjunto periquito al infierno… de nuevo. Hace sólo dos temporadas que los blanquiazules jugaban en Primera. De hecho, han sido los dos descensos más seguidos de la historia blanquiazul. Anteriormente, habían bajado en la 61-62, 68-69, 88-89, 92-23 y la 2019-20.
El Espanyol, eso sí, se aferra al pasado en este momento tan duro para los seguidores. Los catalanes siempre que han bajado a Segunda han ascendido a la temporada siguiente. Es decir, nunca han estado más de un año en la categoría de plata y eso es, precisamente, en lo que trabajarán en los despachos del RCDE Stadium desde este mismo lunes.
Los periquitos no han terminado de despegar en toda la temporada. Los números son contundentes y muy negativos. Saldan, a falta de una jornada, la campaña con 36 puntos repartidos en 8 victorias, 12 empates y 17 derrotas. Lo más curioso es que Joselu puede terminar la temporada como el máximo realizador nacional. A día de hoy, lidera la pelea por el Zarra. El atacante ha anotado 16 tantos y Braithwaite 10. Entre los dos delanteros atesoran 26. Pero ni así. El Espanyol se ha visto lastrado por la parcela defensiva.
La portería ha sido un verdadero calvario. En verano, la entidad revolucionó la retaguardia y no renovó a Diego López ni Oier. El club apostó por Lecomte y Álvaro. Los dos metas se fueron alternando bajo palos debido a los gravísimos errores que firmaban y, en enero, salió el francés y llegó Pacheco. Aportó algo más de solidez.
Los fallos en defensa también fueron importantes. El Espanyol intentó con la llegada de César Montes acabar con los desajustes atrás, pero los errores no han cesado. También llegó Pierre-Gabriel, aunque su rendimiento no ha sido bueno.