VÍDEO BLOG #Minuto92: Canteranos en el primer equipo, por Víctor J. Hernández Bru.
La lesión de El Bilal, el ostracismo forzoso de Marko Milovanovic, las extrañas y nunca explicadas ausencias de Dyego Sousa y la cabezonería de El Assy y Gonçalves de apenas reforzar al equipo en el mercado invernal hacen que el equipo esté en riesgo de no tener a ningún delantero centro en alguno de los partidos que restan de aquí a final de temporada, a pesar de haber contado con cuatro nueves en la temporada.
Si finalmente Luis Suarez se uniera a la nómina de ausencias forzadas, en Vigo o en cualquiera de los partidos de liga que restan, las opciones para presentar algún delantero no son muchas. Ha habido quien ha apuntado la opción de Ramazani, que evidentemente no es un ‘9’ pero que ha actuado como falso tal en algún momento. Desde luego no parece una opción seria.
También está la opción de ubicar en la punta de ataque a Leo Baptistao, al que sí hemos visto desenvolverse en tal posición antaño, aunque hace ya mucho que su demarcación natural es la banda. Personalmente, me inclino más por esta posibilidad.
Sin embargo, hay otra corriente, que es la que aboga por colocar en la punta del ataque, incluso como titular, al canterano Marciano, futbolista en edad juvenil cuyo equipo es el filial. Inicialmente parece un disparate, pero la realidad es que el club está muy cerca de que él sea el delantero más veterano que pudiera alinearse con la primera plantilla.
En otros clubes y circunstancias, hemos visto a jugadores dar el salto al primer equipo en circunstancias extremas, de necesidad perentoria y, en algunos de esos casos, la cosa no sólo ha salido bien sino que ha supuesto el inicio de una larga historia de éxitos. Siempre suelo poner, en este ámbito, el ejemplo de Raúl González en el Real Madrid.
La diferencia es que este Almería no sólo está roto por las lesiones sino también en el plano anímico, circunstancias en las que colocar ahí a un niño como Marciano podría ser un caso de alta traición deportiva. Sin embargo, más allá de que yo crea que la opción más lógica sería la de Baptistao, no puedo ocultar que me pica la curiosidad de ver qué es lo que ocurriría en el caso de ser Marciano el elegido.
De lo que no cabe duda es de que la llegada de este canterano al primer equipo sería mucho más un accidente, la consecuencia de una nefasta planificación deportiva que una verdadera apuesta por la cantera rojiblanca. No se me ocurre peor manera de encarar el tramo decisivo de la liga. Más que a Marciano, quizás fuera conveniente encomendarse a todo el santoral del Nuevo y del Antiguo Testamento.