Destaca Cabello que los jugadores intentan centrarse en lo deportivo mientras la junta directiva intenta pagar alguna de las nóminas atrasadas.
David Cabello se marchó de Vélez con sensaciones encontradas y es que el equipo, como en otros partidos de la temporada, ofreció dos imágenes bien distintas en un mismo partido. El técnico admitió que «hubo una primera parte en la que se llevó el plan de partido, hemos tenido incluso esa personalidad para ponerte por delante. En la segunda parte no habían tenido esa personalidad para llevar a cabo lo que había pretendido en la primera».
El responsable técnico del Poli puso en valor que «somos un equipo que se encuentra cómodo con el balón, que defiende con él y ubica a sus jugadores en espacios donde son determinantes. Hemos aprovechado esos primeros minutos para ponernos por delante en el marcador en un campo complicado, aunque en la segunda parte el equipo no ha tenido esa personalidad para llevar a cabo el plan de partido».
Sobre el ambiente planeó la difícil situación por la que se está pasando y que ha llevado a los jugadores a no cobrar un solo euro desde el pasado año. En este sentido, Cabello indicó que «ellos intentan abstraerse de toda esa situación que viven, pero hay momentos donde al final hace mella en el día a día, lo van sobrellevando y están confiados en que la situación mejore en los próximos días, que el club haga su trabajo como viene haciéndolo y se solucionen esos problemas que les va a ayudar sobre todo para conseguir esos objetivos».
De momento la postura del cuerpo técnico y la plantilla sigue siendo la de dar un voto de confianza a la directiva encabezada por Alejandro Bouza, pese a que la situación es crítica tanto para jugadores que comenzaron la temporada y que necesitan liquidez inmediata como para quienes se han incorporado posteriormente y, en algunos casos, aún no han percibido nada del club.