VÍDEO BLOG #Minuto92: Turky no es tonto, por Víctor J. Hernández Bru.
Aunque todos los almerienses hemos visto su foto, en realidad nadie sabe muy bien aquí cómo es Turky Al Sheikh, el dueño de la UD Almería. El jefe de la UDA es un tipo rico, muy rico, eso lo sabe todo el mundo; y sus gestos apuntan a que es un tipo muy generoso, que incluso llegó a regalar a Almería a través de su Ayuntamiento, nada menos que un millón de euros durante la pandemia.
Pero, ¿qué más sabemos de Turky? Realmente poco más. Y no será porque no haya información sobre él en internet. Quienes escriben sobre él en los lugares más accesibles de Internet resaltan siempre su filantropía e inclinación para llevar a cabo donaciones desinteresadas. Además, se resalta su trayectoria profesional ligada al deporte, siempre como dirigente. Como presidente, su imagen inicial fue bastante excéntrica, del tipo de dirigente de gatillo fácil a la hora de cambiar de entrenador e inclinado a confeccionar proyectos a base de talonario y con poca fe en los profesionales del fútbol. Una imagen que se ha matizado en parte y sólo en parte con el tiempo.
Pero, ¿qué más sabemos de Turky? Pues muy poco más. Hoy en día, tras una gran inversión para la adquisición de terrenos en El Toyo, no parece haber dudas de que su proyecto para el Almería es a largo plazo, que no será fácil que una ventolera le haga abandonar de la noche a la mañana.
Sin embargo, ¿qué piensa realmente Turky del actual proyecto de la UDA? ¿Cuál es su modelo? ¿Cómo reaccionaría ante un descenso de categoría? ¿Confía realmente en Mohamed El Assy y Joao Gonçalves? Y si es así, ¿por qué? ¿Por qué estos dos señores son sus hombres de confianza, cuando en realidad no están avalados por una trayectoria de éxitos en la gestión deportiva?
Son muchas preguntas sin responder. Sin embargo, a pesar de la falta de certezas, sí hay algo de lo que estoy bastante seguro: de que Turky no es nada tonto. Un tipo que ha llegado adonde ha llegado él, ha de ser una persona extremadamente inteligente y, al mismo tiempo, con gran experiencia y preparación.
Siendo esto así, estoy convencido de que Turky ya sabe, a estas alturas, cómo es el modelo de gestión que El Assy y Gonçalves están llevando a cabo en la UDA, cuáles son sus parámetros de actuación profesional, qué estilo de vida llevan y hasta qué punto es o no compatible con los puestos que ocupan. Estoy convencido de que Turky tiene métodos para, a casi 4.500 kilómetros de distancia, para conocer al dedillo todo lo que está pasando en el club en el que está invirtiendo un pastizal.
Y si esto es así, yo estoy también convencido de que, a estas alturas, Turky sabe muy bien que para que la UDA termine convirtiéndose en ese proyecto exitoso a nivel europeo que él mismo ha trasladado como ilusión y objetivo, ha de dar un giro radical en la cúpula y colocar en ella a auténticos profesionales de la gestión deportiva.