La negra noche en Vallecas deja dos ausencias muy importantes de cara al próximo encuentro ante el Real Betis que se disputará el sábado.
El Almería regresa este martes de Madrid después del partido disputado frente al Rayo Vallecano, y tras aterrizar en el aeropuerto de nuestra ciudad la expedición rojiblanca se dirigirá al Estadio de los Juegos Mediterráneos, aunque en esta ocasión no habrá entrenamiento, sino jornada de descanso en una semana que es corta para nuestros representes. De hecho el sábado, a las 16,15 horas, recibirán al Real Betis Balompié.
El miércoles reanudarán el trabajo con una sesión que se celebrará a las 10,30 horas en el Anexo. Será el momento de comenzar a pensar en la visita de los béticos en otro exigente compromiso para la UD Almería. El jueves y el viernes la plantilla se ejercitará, a puerta cerrada, en el mismo escenario del encuentro
Para esta nueva cita serán bajas Lucas Robertone y Leo Baptistao, que en Vallecas vieron la quinta tarjeta amarilla de la temporada y tendrán que cumplir sanción. El Almería sufrió una incidencia en su viaje de ida a Madrid para disputar el partido contra el Rayo Vallecano, ya que el avión que debía llevarles hasta la capital de España despegó con un retraso de cuatro horas y media sobre el horario previsto.
A las nueve de la mañana la expedición rojiblanca se trasladaba al aeropuerto de nuestra ciudad para volar a las 9,45, pero antes de embarcar se comunicaba que la aeronave tenía una fuga de combustible que había que solventar. Antes ello, se regresó al Estadio y los jugadores se marcharon a sus domicilios para descansar hasta el mediodía.
Rápidamente se montó el dispositivo para que los futbolistas pudieran almorzar en el estadio y realizar también en la misma instalación la charla técnica previa a la confrontación. A las 14,15 el avión despegaba de Almería y pasadas las cuatro de la tarde la expedición llegaba a su hotel de concentración en Madrid, el Meliá Princesa, donde aguardó el momento de trasladarse a Vallecas.
