El jugador gallego se ha despedido del Sporting de Gijón reconociendo que volver a coger el tren de la Primera División es un aliciente muy importante.
Diego Mariño quiso mandar un último mensaje a la afición del Sporting de Gijón tras hacerse oficial su salida a la UD Almería. El portero gallego cerró así una etapa de seis años y medio defendiendo la camiseta rojiblanca durante 222 partidos en los que ha conseguido ser una de las piezas más reconocidas de la historia reciente del club. Una vez hecho oficial su adiós, el de Lugo se quiso despedir a través de un sentido vídeo.
Quiso empezar Mariño con los agradecimientos. «Dar las gracias al club, a la afición, del primero al último. Gracias a los compañeros y entrenadores, a todos los trabajadores del club, oficinas, limpiadoras, fisios… todos con los que he compartido momentos», explicó el portero antes de dar paso a los motivos de su adiós.
«Es una decisión difícil pero viendo las connotaciones que se dan, terminando contrato en junio, la oferta del Almería que es uno de los últimos trenes para jugar en Primera división. Es un reto ilusionante y una oferta que no puedo rechazar. De ahí la rapidez en todo», comentó al vigués antes de dar paso a la parte más emocional de su discurso.
El guardameta ya se ejercita con el Almería a la espera de que se resuelva la comprometida situación en la portería con cuatro inquilinos, algo inédito en el fútbol profesional y que obliga a actuar en las últimas horas del mercado. La salida de Pacheco y la cesión de Fuoli, o su vuelta al filial, puede aliviar a un cuerpo técnico que tendría difícil gestionar este exceso de porteros.